Al-Azhar ha sido y sigue siendo el foro del conocimiento y el precursor en la enseñanza de las ciencias islámicas de todo el mundo. Es la institución sunita más destacada y prestigiosa del mundo islámico a la cual se refugian miles de estudiantes para estudiar y aprender la moderación y la tolerancia del Islam, tanto en su universidad como en su mezquita. El extremismo no ha podido prosperar entre los graduados de al-Azhar gracias a los planes y programas de estudio que se basan en el concepto de la convivencia mutua entre todos los individuos de la misma sociedad. Prueba de ello, ninguno de sus ulemas o graduados se alistó en las filas de los movimientos terroristas que cometen los atentados contra los inocentes en nombre del Islam.
Cabe destacar que la fundación de la mezquita de al-Azhar se remonta a la época fatimí. Se fundó en el periodo (970-972), pero con el transcurso de los siglos fue objeto de muchas reformas en su construcción. Al principio, se consideraba la mezquita nacional del Estado Fatimí en Egipto. Se convirtió, de esta manera, en la primera mezquita en el Cairo. En la actualidad, es también el monumento fatimí más antiguo de todo el país. Desde el primer día de su fundación, la mezquita se convirtió en un centro de culto religioso y, al mismo tiempo, de enseñanza y aprendizaje.
Al principio se enseñaba en la mezquita las ciencias coránicas, el árabe y la jurisprudencia basándose en las cuatro escuelas principales de dicha rama. De esta manera, al-Azhar contribuyó en enriquecer la vida intelectual de aquel entonces con varias aportaciones, sobre todo la de presentar al mundo islámico un grupo de ulemas y eruditos que se encargaron de difundir las ciencias islámicas en todas las partes del mundo. Más tarde se empezó a estudiar otras ciencias como matemáticas, astronomía y geometría. Desde aquel entonces al-Azhar gozó de gran importancia y fama brillante en todas las partes del mundo. Actualmente, la mezquita se convirtió, además de un hogar para realizar las oraciones, en un centro donde se mantienen sesiones de Fiqh (jurisprudencia) para el público e incluso clases en varios idiomas como el inglés, el francés y el español para los extranjeros.
En los tiempos pasados, la enseñanza en la mezquita de al-Azhar se desarrollaba en el marco de sesiones (círculos de estudio) en las cuales se sentaba el ulema al lado de una columna y a su alrededor se sientan todos los alumnos. Se organizaba sesiones y clases para las mujeres dentro de la misma mezquita. Así que, la mezquita de al-Azhar desempeñaba dos funciones, una didáctica y otra relacionada con el culto islámico.
En 1911 se fundó el Consejo Superior de al-Azhar presidido por el Gran Imán, y se estableció el Organismo de los Grandes Eruditos permitiéndose construir colegios religiosos de primaria y de bachillerato en las provincias del Estado vinculados a la institución de al-Azhar . En 1930 se fundaron las tres primeras facultades de la Universidad de al-Azhar: Facultad de Legislación, Facultad de Principios de Religión y Facultad de Lengua Árabe. En 1961 inició a inaugurarse las facultades de Medicina, Odontología, Farmacia, Educación, Ingeniería, e Idiomas y Traducción. Según el informe del Sistema Central de Movilización Pública y Estadísticas, publicado en noviembre 2012, la Universidad de al-Azhar cuenta con más de 16,5% del total del alumnado de todas las universidades egipcias. Este porcentaje refleja la extensión enorme de la enseñanza patrocinada por la institución de al-Azhar en todo el país.
Es incuestionable que al-Azhar es más que una institución religiosa. Además de hacerse cargo de difundir el Islam moderado en todas las partes del mundo, desempeña un papel muy importante en el movimiento nacionalista de Egipto a lo largo de varios siglos. En 1795 dirigió las revoluciones contra los mamelucos por las injusticias que enfrentaban los egipcios en los últimos años del poder mameluco. Además, al-Azhar y sus ulemas resistieron contra la invasión francesa y dirigieron las dos revoluciones contra ella.
En 1805 los eruditos y graduados de al-Azhar dirigieron la revolución egipcia y apoyaron el deseo de la población en seleccionar sus gobernadores a través de elegir a Mohamed Aly Basha como rey del país. En 1919 al-Azhar desempeñó un papel muy importante contra la invasión inglesa hasta el estallido de la revolución de 1952.
En la historia moderna del país, concretamente después de la revolución del 25 de enero de 2011, al-Azhar tuvo un papel muy importante en crear la reconciliación entre los egipcios y tomó varias iniciativas para reformar la sociedad y confirmar los principios de la ciudadanía y la unidad nacional en Egipto.
Se formó el Hogar de la Familia Egipcia, presidido por El Gran Imán Prof. Dr. Ahmed Al Tayeb, jefe de al-Azhar con la participación del líder espiritual de la Iglesia Ortodoxa Copta, el papa Teodoro II, con el propósito de acabar con los intensos disturbios, que ocurrieron después de dicha revolución entre algunos coptos y otros musulmanes. El fin era difundir la cultura de la convivencia pacífica en la sociedad egipcia y resolver los problemas que se ocurren, de vez en cuando, afirmando los valores supremos comunes entre las religiones ; y establecer las bases de la cooperación y de la convivencia entre los ciudadanos de la misma patria. Además detectar y suponer los medios necesarios para mantener la paz en la sociedad y difundir las virtudes de la misericordia, la responsabilidad y la pertenencia a la patria entre todos los egipcios.
Por lo tanto, al-Azhar es la institución más importante en el mundo islámico que se esfuerza en establecer los lazos fraternales. La convivencia entre musulmanes y cristianos en Egipto se convirtió en un buen ejemplo de la convivencia entre los adeptos de dos religiones diferentes. Al-Azhar se hizo cargo de esta misión, la de difundir la paz y la tolerancia, estrechar las relaciones entre los cristianos y los musulmanes de Egipto a lo largo de varios siglos.
En este sentido, cabe mostrar que desde la llegada del Islam a Egipto, los cristianos y los musulmanes conviven tranquilamente, se tratan entre sí bajo el concepto del respeto mutuo y la solidaridad entre todos, incluso en los momentos más difíciles del país todos se solidarizaban para enfrentarse a los enemigos que aspiran a apropiarse con el territorio egipcio. Así que, los musulmanes y los cristianos comparten sus tristezas y alegrías, se visitan entre sí y trabajan juntos en el mismo lugar. Los primeros musulmanes en Egipto nunca pensaron en destruir los lugares de culto de los coptos ni expulsarlos fuera del país ni agredirlos; sino que compartieron con ellos la vida en este país desde aquel momento hasta hoy en día. Ambos han sido y siguen siendo vinculados por el amor a la patria. Al-Azhar, por su parte, fomenta y apoya este afecto a través de proyectos, actividades e iniciativas, y en muchas ocasiones, en colaboración con la iglesia ortodoxa de Egipto para establecer la paz y la seguridad del país, y el bien estar de todos los ciudadanos.
Es digno mencionar que al–Azhar hace todo lo que está a su alcance para el futuro de este país y también el de toda la humanidad a través de enviar caravanas de paz, proyecto iniciado hace dos años en colaboración con el Consejo de los Sabios Musulmanes en muchos países de todos los continentes para difundir el mensaje de paz en todas las sociedades, además de las visitas que emprendió el Gran Imán al extranjero para establecer la paz con las otras religiones.
Conjuntamente, para confirmar el principio de la igualdad entre los seres humanos, al-Azhar organiza conferencias y encuentros interreligiosos a nivel mundial. Últimamente se celebró la conferencia internacional “la libertad y la ciudadanía: la diversidad y la integración”, a la cual se convocaron más de 600 delegados participantes de la conferencia, procedentes de 50 países, quienes llegaron a firmar “La declaración de convivencia recíproca islámico-cristiana”, que condenó el uso de la violencia en nombre de la religión e indicó como principio de ciudadanía el criterio de la convivencia pacífica entre personas de diferentes religiones.
En este sentido, al-Azhar gestiona el mensaje del Noble Corán de que toda la gente tiene el derecho de vivir con dignidad sin discriminación ni racismo. Por tanto, el ser humano, en general, ha sido honrado desde la perspectiva del Noble Corán sin tener en cuenta su religión, su color de piel, ni su raza. Al respecto Allah, alabado sea, dice “ciertamente hemos honrado a los hijos de Adán”; (Sura del viaje Nocturno:70).
Todos los seres humanos, sean musulmanes, cristianos, judíos, etc. son iguales. Allah dice en este sentido: “¡Hombres! Temed a vuestro Señor que os creó a partir de un solo ser, creando de él a su pareja y generando a partir de ambos muchos hombres y mujeres. Y temed a Allah, por Quien os pedís unos a otros, y respetad los lazos de sangre. Realmente Allah os está observando”; (Sura de las mujeres: 01). La diferencia entre los seres humanos al respecto de sus colores de piel, en su raza, sus idiomas representa una de los milagros que demuestran la grandeza de Allah y su poder extraordinario en la creación de este mundo. Al respecto Allah dice “Y parte de Sus signos es la creación de los cielos y de la tierra y la diversidad de vuestras lenguas y colores. Realmente en eso hay signos para las criaturas” (Sura de los Romanos: 22). Allah estableció el principio de conocrse: “¡Hombres! Os hemos creado a partir de un varón y de una hembra y os hemos hecho pueblos y tribus distintos para que os reconocierais unos a otros” (Sura de las Habitaciones: 13).
Con estos nobles principios, los musulmanes se quedaron en la península ibérica más de ocho siglos en plena paz y seguridad con los cristianos e incluso con los judíos. Él no es enemigo de nadie ni considera como enemigos a los adeptos de las otras religiones sino como hermanos dentro de la misma partía y debajo del concepto humano.
Unidad de Español
Observatorio de al-Azhar en Lenguas Extranjeras