No cabe la menor duda de que los jóvenes representan la columna vertebral de cualquier sociedad, la base principal del desarrollo de los países, y a la vez podrían ser el motivo de la decadencia, el deterioro de las patrias en el caso de no recibir la debida importancia por parte de la sociedad y del estado.

Por este motivo, resulta necesario abordar dicha cuestión desde una perspectiva islámica y mostrar la metodología del islam en educar y formar a los jóvenes. Dicha metodología ha determinado el papel que desempeñaron los jóvenes ‎ y la responsabilidad que asumieron a lo largo de la historia.

Pues, el islam es una religión completa que abarca todos los aspectos de la vida, de modo que la legislación islámica se ha convertido en un imprescindible modo de vida para todos los seres humanos debido al conjunto de valores y enseñanzas mostrados tanto en el Corán como en la sunna profética. Al respecto, Allah dice: "Hoy os he completado vuestra Práctica de Adoración, he culminado Mi bendición sobre vosotros y os he aceptado complacido el Islam como Práctica de Adoración", (Corán, sura de la Mesa: 03(.

Además, Allah descendió el Sagrado Corán sobre el Profeta, la paz y las bendiciones de Allah sean con él, como guía para todos los mundos, para orientarles a lo bueno y advertirles de lo malo, e incluso hizo del Profeta un ejemplo a seguir para todos los creyentes. En este sentido, Allah dice: "Y lo que os da el Mensajero tomadlo, pero lo que os prohíba dejadlo", Corán, sura del Encuentro: 07).

El islam dio gran importancia a los jóvenes en cuanto a ‎su ‎educación para protegerles de todos los males y de ‎la corrupción que ‎podrían surgir. Por este motivo, el islam exige que los jóvenes se ‎caractericen con las virtudes más sublimes como la sinceridad, castidad, ‎bondad, lealtad, etc. Cumpliendo, de esta manera, los mandatos divinos ‎y las enseñanzas de nuestro profeta, quien dijo: "Ciertamente, fui enviado ‎para perfeccionar las más elevadas virtudes".‎

Así que, el islam llama a todos los individuos de la sociedad, sobre todo a los jóvenes, a seguir las enseñanzas más excelentes de la ética humana y evitar todos los vicios posibles con el fin de tener éxito tanto en la vida mundana como en la Otra. Al respecto, Allah dice: "Que habrá triunfado el que la purifique. Y habrá perdido quien la lleve al extravío", (Corán, sura del Sol: 9-10(. Entonces, esta purificación se considera la base de la metodología de educar y formar a los jóvenes en el islam‏.‏

Además, el islam se preocupa por los jóvenes desde la niñez y llama a ‎preocuparse por los niños y abordar sus problemas, sobre todo los ‎psicológicos, con el fin de ayudarles a ser personas activas y ‎miembros útiles para toda la sociedad cuando sean jóvenes. En este sentido, el profeta Lucman aconseja a su hijo en el Corán diciendo: "¡Hijo mío! Establece la Oración, ordena lo reconocido, prohíbe lo reprobable y ten paciencia con lo que venga, es cierto que eso es parte de los asuntos que requieren entereza", (Corán, sura de Lucman: 17).

Al mismo tiempo, las enseñanzas de educación en el islam incitan a fortalecer el sentido de responsabilidad individual y colectiva de los jóvenes que forman parte de la sociedad con el fin de establecer en ellos el sentido de la pertenencia hacia la patria y el de la ciudadanía activa para preocuparse, más tarde, con los problemas y cuestiones más importantes de la patria, y pensar de  forma creativa  para llegar a soluciones a dichos problemas que surgen de vez en cuando en las sociedades.‎ Además, el islam llamó para prestar más atención a los talentos y las cualidades especiales de los jóvenes y a proteger los individuos creativos e innovadores que las sociedades necesitan para su progreso y desarrollo.

Es indudable que dicha metodología debería presentar personas capaces de realizar lo que puedan para la prosperidad de las sociedades humanas. No obstante, no podemos negar la existencia de otras personas que fueron desviados del camino de dicha metodología por una manera u otra, motivo por lo cual se han convertido en presas para los grupos extremistas que pudieron reclutarlos fácilmente debido a su desvío de la metodología correcta del islam. La concienciación a los jóvenes de tales caminos incorrectos es un deber mutuo que deben cumplir tanto el estado como la sociedad.