En medio de una gran recepción oficial y popular, el Gran Imán de al-Azhar llega a la sede del Centro Principal de Conferencias en la capital nigeriana Abuya, en la cual dirige un discurso a los pueblos africanos y a todos los musulmanes del mundo.
La Sala de Conferencias fue repleta de miles asistentes de todas las comunidades nigerianas que estaban dispuestos a escuchar el discurso del Gran Imán.
Y a continuación están los títulos principales del discurso y luego se facilitará el discurso completo.
El Gran Imán pronuncia un discurso al pueblo africano desde la capital nigeriana Abuya y confirma:
Estoy aquí para confirmar que el Islam no llamó nunca a la violencia ni al terrorismo, sino a la humanidad, a la seguridad y a la paz.
No se les ocurrió a los musulmanes que tendrían que girar por todo el horizonte para defender su religión y revelar su esencia y autenticidad.
Los grupos extremistas y terroristas se procuran persistentemente a distorsionar la imagen del Islam a nivel mundial y mostrarlo como si fuera una religión sangrienta y de violencia salvaje.
Hay que buscar a los beneficiados de este desorden, que, por una parte, apoyan estos crímenes tan atroces a través de financiar, armar y planificar; y por otra, hay quienes los proporcionan una cubierta legítima con pruebas falsas y desviadas.
El Islam es el término de la religión común llamado por todos los profetas y al cual pertenecen todos los creyentes.
El mensaje del Islam corresponde con los otros mensajes anteriores en tanto la esencia y la autenticidad como en el contenido.
El Corán considera iguales a todos los humanos; ya que son hijos de solamente padre y madre.
El Corán acredita los libros divinos anteriores y describe a la Torá y el Evangelio como guía y luz.
La diversidad es una regla divina aprobada por el Corán a través de sus textos evidentes.
No es razonable ni prudente que Allah ponga la variación como base de vida entre los humanos y luego ordena algunos de ellos forzar a los demás para que adopten la misma creencia!!
El Islam es la religión de paz e igualdad con excelencia; y queda claro que todo lo que se dice al contrario es pura mentira.
La legitimidad de dar el permiso a matar en el Islam es para defenderse, y no por infidelidad ni la discordancia en la creencia del otro.
A lo largo de la historia islámica, especialmente durante la era de las conquistas, los musulmanes nunca forzaron a los pueblos de los países conquistados que se convirtieran al Islam bajo la amenaza de la espada.
Resulta imprescindible poner de relieve la jurisprudencia auténtica, y los eruditos deben ser realistas para que estén al corriente de la crisis de la Fetua en la religión.
Los eruditos musulmanes tienen que asumir la responsabilidad de demostrar la autenticidad de esta religión que llama a la fraternidad, la comprensión mutua y la paz entre las personas en el este y el oeste.
Hay que restaurar la “jurisprudencia de la variación auténtica” que se basa en la diversidad y riqueza, y que ha sido la fuente de la fuerza de esta nación y de su civilización durante siglos.
El consenso de los ulemas debe ser el criterio decisivo para distinguir lo falso de lo correcto. No debe obligar a la gente a seguir una doctrina jurídica en concreto y luego incitarla una vez por gusto y otra por temor.
El caos del desacuerdo, tan lejano de las reglas de la ciencia, es la causa del surgimiento de las sentencias de la acusación de infidelidad y la violencia entre los musulmanes.
Al-Azhar hace muchos esfuerzos para difundir la moderación, la paz y mostrar los peligros del pensamiento extremista.
Nuestra visita es para confirmar el apoyo de al-Azhar por la unidad del pueblo de Nigeria en todos los ámbitos de la vida, la estabilidad y renacimiento científico y educativo.
El aumento de las becas aprobadas para los hijos del pueblo nigeriano de 30 a cincuenta becas anuales, a favor de los campos científicos como la medicina, la farmacia y la ingeniería.