España es uno de los países pioneros de Europa en poner en marcha la enseñanza religiosa en los colegios públicos a fin de hacerles llegar a las nuevas generaciones los valores sublimes que educan el alma, el espíritu para formar parte, de una manera eficaz, del desarrollo y la evolución del Estado. Asimismo, este comportamiento responde a una necesidad urgente debido a la invasión masiva de información, vía los diferentes medios de comunicación, que podría influir negativamente en los jóvenes, y llevarlos a olvidarse de sus valores religiosos y sus principios morales. 
La enseñanza religiosa en los colegios públicos de España se ha convertido en uno de los derechos otorgados por las leyes del país para todos los alumnos sean musulmanes o evangélicos, puesto que los musulmanes representan una gran masa del alumnado y solicitan frecuentemente que sus hijos reciban clases sobre el islam. Dichas solicitudes se desprenden de la vital importancia que brinda la asignatura del islam para los alumnos musulmanes de España que viven y se integran positivamente en una sociedad, cuya cultura y religión es diferente de la suya que representa su identidad islámica. 
La importancia de esta cuestión radica en la necesidad urgente que opone la situación actual de las nuevas generaciones de los musulmanes de descendencia árabe e islámica, y el temor de que se involucren en las sociedades occidentales olvidándose de su legado cultural y religiosos que es la base principal de la identidad del musulmán. No cabe la menor duda de que el árabe es un signo idéntico que está en el camino de extinción entre la población árabe e islámica de España. Asimismo, las ciencias islámicas y el conocimiento religioso son cuestiones imprescindibles, sobre todo para aquellos que nacieron en un país donde el islam y sus ciencias reciben diariamente fuerte golpes y amenazas por parte de los xenófobos y los partidos de extrema derecha que obstaculizan tenazmente todas las iniciativas que  procuran normalizar la enseñanza de la asignatura islámica en los colegios a lo largo de las últimas décadas desde que se declaró el acuerdo entre el gobierno español y la comisión islámica que garantiza impartir clases de islam para los alumnos musulmanes en las diferentes comunidades y autónomas del Estado.
Pues, la identidad islámica es la cuestión que preocupa a todos los padres musulmanes que quieren preservarla y enraizarla en sus hijos a través de la enseñanza islámica que implica educarlos de una manera apropiada basándose en una metodología moderada que les permite conocer de cerca su religión y todo aquello que deben cumplir para seguir guardando su religión y mostrar su belleza a los demás a través de sus propios comportamientos.
Por otra parte, los estereotipos y prejuicios alrededor del islam y los musulmanes han sido y siguen siendo un tema favorable para los medios de comunicación que ayudaron, deliberada o accidentalmente, a desfamar la imagen del islam representándolo como religión de violencia y terrorismo. Por consiguiente, los musulmanes y las nuevas generaciones deben estudiar su religión para que sean capaces de refutar las noticias falsas que se lanzan, de vez en cuando, contra el islam, y acabar con todos aquellos prejuicios que fueron motivo de persecución y discriminación para muchos de la comunidad musulmana de España a lo largo de muchos años.
El Obsservatorio de al-Azhar opina que recibir el conocimiento islámico a través de las instituciones oficiales del gobierno ayudaría, por un lado, a formar  los alumnos sobre las enseñanzas verdaderas, auténticas y carentes del fanatismo que se adopta en muchas partes del mundo, y por otro lado, protegería a los jóvenes de caer presas en las redes de reclutamiento y radicalización de los grupos terroristas que proponen amplificar sus estrategias y actividades terroristas a través de los lobos solitarios, aprovechando su ignorancia y el poco conocimiento que tienen respecto a su religión que llama a la paz, la tolerancia y rechazar la violencia y la agresión.

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