Según el Observatorio de Al-Azhar contra el Extremismo, el número de ataques terroristas que tuvieron lugar en el continente africano durante el mes de octubre de 2022 alcanzó las 51 operaciones, causando la muerte de 351 personas, la ejecución de 6, la lesión de 556, y el secuestro de 27 víctimas. Así, en ese mes se ha producido un ligero descenso en el número de operaciones respecto al de septiembre, en el que la cifra de operaciones ascendió a 54.
A pesar de que el número de operaciones terroristas se disminuyó en octubre, la cifra de muertos y heridos superó a la de septiembre, y esto se debe al recrudecimiento de enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los grupos terroristas. Pues los ejércitos africanos, en cooperación con las autoridades pertinentes a nivel local e internacional, se esfuerzan por enfrentarse a los grupos terroristas activos en el continente y repeler sus ataques, lo que ha frenado el número de operaciones terroristas en el mes de octubre.
También prevalece una táctica de ataque y retirada también llamada “golpe y fuga” entre estas organizaciones que atacan y luego huyen, a la luz de su competencia por el liderazgo y el restablecimiento de autoridad, y para demostrar, por un lado, que cada organización se encuentra en un terreno sólido y, por otro, cada grupo trata de preservar lo que queda de su fuerza y armamento.
Las operaciones terroristas en la región de África Oriental alcanzaron la mayor tasa de víctimas del terrorismo, ya que fue objeto de 30 atentados, lo que equivale al 58,8% del total de operaciones terroristas realizadas en el continente durante el mes, como resultado de lo cual cayeron 237 muertos, 441 personas resultaron heridas y 3 secuestradas, así como la ejecución de otras seis más. Somalia tuvo la mayor parte del número de operaciones, ya que el movimiento terrorista "Ash-Shabab" llevó a cabo 26 operaciones, incluida una operación de asesinato, que provocaron la muerte de 235, la ejecución de seis y la herida de 441, mientras que Kenia, fue objeto de dos operaciones terroristas consecutivas, sin causar muertos o heridos, dejando tras sí el secuestro de tres personas. 
En Mozambique, dos personas murieron como resultado de dos operaciones terroristas lanzadas por grupos terroristas y movimientos rebeldes que procuran controlar sus minas de oro para financiar sus operaciones armadas.
El Sahel africano ocupó el segundo lugar respecto al número de atentados, víctimas y heridos. En esa zona se llevaron a cabo 12 ataques terroristas, (23,5% del número total de operaciones terroristas), con un saldo de 76 muertos y 111 heridos. Burkina Faso está a la vanguardia de los países de la región que han sido objeto de cuatro operaciones que dejaron 35 muertos y 54 heridos. Mientras tanto, Níger presenció 4 operaciones que acabaron con la vida de 15 víctimas y la lesión de otras dos personas. Malí fue objeto también de tres operaciones que saldaron con 18 de fallecidos y 55 heridos. 
Los países de la región del Sahel se enfrentan a grandes desafíos, entre los que destaca el continuo deterioro de la situación de seguridad, especialmente en el llamado “triángulo de la muerte”, que es el triángulo fronterizo entre “Níger”, “Burkina Faso” y “Malí”, donde se llevan a cabo las operaciones de los grupos terroristas más mortíferas. Por esto, la actividad terrorista se puso a extender a los países costeros que hasta hace poco se libraron en gran medida de los ataques, como los países costeros del Golfo de Guinea, con la amenaza terrorista en África Occidental, extendiéndose hacia el sur desde la región del Sahel hacia la franja que se extiende desde Benín hasta Costa de Marfil.
Por ello, el Observatorio Al-Azhar advierte del aprovechamiento de dichas organizaciones de las difíciles condiciones de vida que vive la población de Benín y otros países ribereños del Golfo de Guinea, lo que podría empujar a algunos desesperados a sumarse a las filas del terrorismo y cooperar con los extremistas. De ahí que, se requiere alcanzar soluciones definitivas para curar las heridas profundas del extremismo violento en aras de que el escenario del terrorismo en los estados del Sahel no vuelva a repetirse nuevamente.
En cuanto a la región centroafricana, ocupó el tercer lugar respecto al número de operaciones, muertos y heridos. Durante el mes de octubre, fue testigo de cinco operaciones terroristas lanzadas por ISIS a través de su brazo armado en África Central. Eso equivale al 9,8% del total de operaciones terroristas en el continente durante el mes citado. La República Democrática del Congo, que vive una peligrosa situación de seguridad, saltó a la palestra en cuanto al número de víctimas, heridos y secuestrados, luego de presenciar la caída de 31 víctimas, la lesión de dos y el secuestro de 21 personas. Mientras que Camerún sufrió dos operaciones terroristas que resultaron en el secuestro de tres sin causar víctimas ni heridos.
En cuanto a África Occidental, conocida por el aumento actividades terroristas de ISIS y Boko Haram, como resultado de la competencia entre ellas, ocupó el cuarto lugar en términos de número de operaciones, víctimas y heridos. Pues fue objeto de cuatro operaciones (el 7,9% del número de operaciones terroristas), perpetradas en Nigeria, causando la muerte de siete personas y otras dos heridas.
El Observatorio Al-Azhar subraya que, a pesar de la importancia de hacer frente a la amenaza y las repercusiones del problema del terrorismo transfronterizo, que ha convertido a África en un entorno fértil para su origen, desarrollo y ejercicio de sus actividades, no ha recibido la atención adecuada, con la necesidad de hacer frente rápida y radicalmente a la expansión del terrorismo en África por parte de la comunidad internacional y las organizaciones interesadas.