El grupo terrorista Dáesh ha estado llevando a cabo operaciones en Afganistán desde principios de 2015. En una de sus revistas, anunciaron que combatientes de las provincias de Nangarhar, Kunar, Kandahar, Khost, Ghazni, Wardak, Helmand, Kunduz, Logar y Nangarhar se unieron a la organización en Afganistán. Además, reclutaron a numerosos combatientes de las regiones de Bajaur, Orakzai, Kurram, Waziristan y Khyber en Pakistán bajo la bandera del Dáesh en Jorasán. Inicialmente, esta organización terrorista se limitaba a la provincia oriental de Nangarhar, pero luego se expandió hacia el norte y noreste. Algunos de sus miembros pertenecen a la etnia uzbeca y la mayoría de ellos provienen del Movimiento Islámico Uzbeco, quienes ingresaron a Afganistán después de ser expulsados del sur de Waziristán debido a operaciones militares del ejército pakistaní. Otros son reclutados de otros países de Asia Central y otras regiones.
En 2019, el número de combatientes del ISIS en Afganistán alcanzó los cinco mil, en comparación con solo mil combatientes en 2018, según informes de inteligencia militar estadounidense (Tolo News en persa, 22 de mayo de 2019). El martes 27 de abril de 2021, el jefe de seguridad nacional de Afganistán anunció que había 408 miembros detenidos del Dáesh en Afganistán, provenientes de 14 países, incluyendo Pakistán, Irán, Turquía, Indonesia, Argelia, Bangladesh, India y Maldivas (Deutsche Welle en persa, 27 de abril de 2021).
Después de que los talibanes tomaron el poder el 15 de agosto de 2021, la frecuencia de los ataques terroristas del Estado Islámico en Afganistán aumentó. El grupo terrorista se ha atribuido la responsabilidad de numerosos atentados y operaciones terroristas que han cobrado la vida de muchos civiles y funcionarios. Pocos días después de que los talibanes tomaran el control de la capital, el ISIS llevó a cabo un atentado cerca del abarrotado aeropuerto de Kabul, donde se encontraban ciudadanos que intentaban huir, así como ciudadanos extranjeros y soldados estadounidenses.
El aumento de la actividad de esta organización terrorista en Afganistán durante el último trimestre de 2021 se reflejó en el número de ataques, con 21 ataques en septiembre, 28 ataques en octubre, 30 ataques en noviembre y 28 ataques en diciembre, según informes del sitio web de BBC en persa. Las operaciones del ISIS en el país se han diversificado a lo largo de más de un año y medio bajo el gobierno de los talibanes, que han incluido ataques contra funcionarios gubernamentales, sedes gubernamentales, centros culturales y educativos, escuelas, hospitales, mezquitas y otros objetivos. A continuación, se presenta un resumen de los principales ataques durante este período.
El objetivo de los centros culturales y educativos se llevó a cabo de la siguiente manera:
El 11 de marzo de 2023, se produjo una explosión en el centro cultural "Tabian" en la ciudad de Mazar-e Sharif, la capital de la provincia de Balkh en Afganistán, lo que resultó en la muerte de 3 personas y heridas a alrededor de 30 personas, incluyendo 15 periodistas. Además, la organización llevó a cabo dos explosiones, una en la entrada de la escuela "Lycée Abdurrahim Martyr" y otra frente al centro educativo "Mumtaz" en una zona habitada por la comunidad chií en el oeste de Kabul el 19 de abril de 2022, lo que resultó en la muerte de 9 niños y más de 50 heridos. También se atribuyó la responsabilidad de la explosión en una escuela religiosa en Kabul el 11 de agosto de 2022, que resultó en la muerte del líder religioso destacado Sheikh Rahimullah Haqqani, quien previamente había condenado a la organización por dos intentos de asesinato fallidos en su contra.
Al observar los objetivos de estos centros culturales y educativos que fueron objeto de los ataques reivindicados por la organización, se nota que la mayoría de ellos eran centros chiíes ubicados en áreas habitadas por chiíes. Además, estos centros apoyaban a los talibanes en su guerra contra Estados Unidos y en su gobierno sobre el pueblo afgano. Podemos comprender el objetivo de la organización terrorista con estos ataques, que es sembrar la discordia entre los ciudadanos de una misma nación. Al atacar a los chiíes en particular, se busca que tomen represalias contra otros grupos religiosos y étnicos. Además, al castigar a los chiíes por su apoyo a los talibanes, según la perspectiva de la organización terrorista del grupo Dáesh, se envía un mensaje a todos aquellos que apoyan al movimiento de que "os estamos vigilando y que vuestro destino no será mejor que el de los chiíes".
Atentados contra funcionarios del gobierno talibán:
ISIS se atribuyó la responsabilidad del ataque suicida que mató a Mohammad Dawood Muzmil, el gobernador de los "talibanes" en la provincia de "Balkh", en el norte de Afganistán, el 9 de marzo de 2023. La organización terrorista también se atribuyó la responsabilidad de dos atentados con bomba, uno de los cuales ocurrió en el Hospital Mohammad Daoud Khan en Kabul el 2/11/2022, en el que murió "Hamdullah Mukhlis", el comandante de las fuerzas talibanes en Kabul. El otro está en la provincia de Badakhshan, donde Maulvi Abdul Haq Omar, uno de los líderes de seguridad en la provincia de Badakhshan, fue asesinado, así como el jefe de policía en la provincia de Dakhshan y dos de sus guardias, el 12/1/2023, según fuentes publicitarias afganas. El que medita en estos bombardeos encuentra que la organización terrorista Dáesh busca mostrar fuerza, probar la debilidad del movimiento y su incapacidad para asegurar a sus hombres y ciudadanos, se sabe que los funcionarios están asegurados y custodiados por fuerzas especiales, si Dáesh demuestra su capacidad para penetrar esos guardias y seguros, envía un mensaje de que es más fuerte y capaz de implementar sus planes. Ataque a oficinas gubernamentales: la organización terrorista se atribuyó la responsabilidad del ataque que tuvo lugar el miércoles 11 de enero de 2023 en la calle del Ministerio de Relaciones Exteriores, y tenía como objetivo la sede del ministerio, pero el atacante suicida no logró ingresar a la sede del ministerio, y en este ataque fueron muertos (20) personas e heridas otras (40). También se atribuyó la responsabilidad del ataque que tuvo lugar el lunes 27 de marzo de 2023 cerca del Ministerio de Relaciones Exteriores Afgano en Kabul, y según el portavoz oficial de los talibanes, esta explosión resultó en la muerte de (6) personas, e hirió a otras (12). Entre los muertos había dos diplomáticos del gobierno anterior que trabajaban con el Ministerio de Relaciones Exteriores Talibán. La organización también estuvo detrás del ataque que tuvo lugar en el aeropuerto de Kabul el 2/1 / 2023, y que resultó en la muerte de (12) personas y heridas a otras (18), según datos del gobierno, mientras que la organización afirmó en su declaración que este ataque resultó en la muerte y heridas de (50) personas.
La organización también llevó a cabo un ataque a un hotel habitado por ciudadanos chinos en la capital afgana, Kabul, el 22 de diciembre de 2022, cuando el portavoz talibán, "Zabihullah Mujahid", declaró que todos los huéspedes del hotel habían sobrevivido y que ninguno de los extranjeros murió en este bombardeo. No hay duda de que el objetivo de la organización terrorista de volar esas sedes de gobierno está ligado a sus objetivos de atacar a los funcionarios del gobierno, en un intento de demostrar su capacidad de influir en todas las instituciones del Estado, las más seguras de ellas.
Atacar mezquitas:
La organización terrorista se atribuyó la responsabilidad del atentado que tuvo lugar cerca de la puerta de la mezquita "Eid Gah" en la ciudad de Kabul el 3 de octubre de 2021, y una declaración transmitida por un sitio web afiliado a ISIS declaró que un grupo llamado "Misbah Al-Kanri" llevó a cabo el ataque en medio de una reunión de los talibanes en dicha mezquita. La organización también se atribuyó la responsabilidad del bombardeo de una de las mezquitas chiítas (seh Dokan) en la ciudad de Mazar-i-Sharif, matando a (30) fieles e hiriendo a más de (90) personas. Así como el ataque a fieles el viernes en una de las mezquitas chiítas en la provincia de "Kunduz", matando a casi (50) personas e hiriendo a más de otras (150). Notamos aquí que la mayoría de las mezquitas que fueron atacadas son mezquitas chiítas o mezquitas sunitas frecuentadas por leales talibanes, por lo que el objetivo de la organización de estos bombardeos ya no es solo castigar a los chiítas que declararon su apoyo a los talibanes, así como castigar a los partidarios talibanes no chiítas. A pesar de todas esas operaciones terroristas, cuyo número de víctimas ha aumentado significativamente desde que los talibanes llegaron al poder, "Amir Mottaki Khan", el ministro de Relaciones Exteriores afgano en el gobierno talibán, declaró el 19 de marzo de 2023 que no hay ISIS en Afganistán, y que los incidentes que ocurren se manejan desde el extranjero, y enfatizó que los individuos que luchan contra los talibanes son extranjeros, provenientes del extranjero, y que los afganos no tienen problemas con algunos de ellos. Mientras que el informe de la ONU en el Consejo de Seguridad, que fue preparado por el equipo de monitoreo de sanciones de la ONU contra "Dáesh" y "Al-Qaeda" a principios de febrero de 2022, ha confirmado la afiliación de unos (4 mil) combatientes a la rama de Jorasán de "Dáesh", incluidos hasta (2000) extranjeros que fueron liberados después de la apertura de las cárceles afganas tras el control de los talibanes, y la mayoría de los combatientes fueron reclutados entre las filas de afganos, especialmente aquellos que pertenecían a los talibanes hasta hace poco, (Sitio web "Deutsche Welle", 26 de febrero de 2022) y si los miembros de la organización terrorista son afganos o extranjeros, y si son desertores del movimiento talibán o no, el resultado final de las actividades de ISIS en Afganistán sigue siendo la destrucción de la infraestructura del pueblo afgano, la pérdida de la vida de muchas personas inocentes que pagan el precio de las guerras y la destrucción que afectó a su país sin culpa de aquí está explotando centros culturales chiítas, detonando mezquitas chiítas y sedes gubernamentales, atacando a funcionarios gubernamentales y apuntando a mezquitas frecuentadas por hombres talibanes y civiles, todas estas operaciones están dirigidas al objetivo principal de la organización de decirle al mundo entero "estamos presentes" y si hemos perdido territorio en Siria e Irak, estamos aquí para encontrar una tierra alternativa. Por lo tanto, el Observatorio Al-Azhar hace un llamamiento a la comunidad internacional con todas sus instituciones para hacer frente al extremismo en todas sus formas, y evitar que extienda su influencia en este país destruido por las guerras y aniquilado el futuro de las generaciones que no obtuvieron los derechos mínimos a una vida digna.