El terrorismo es un problema complejo que tiene sus raíces en una variedad de factores, como la pobreza, la desigualdad y los conflictos políticos. En África, el terrorismo ha tenido un impacto devastador en la región, causando la muerte de miles de personas y el desplazamiento de millones más.
En este sentido, la Unidad de Monitoreo en Lenguas Africanas ha estado siguiendo las operaciones de las organizaciones terroristas en África durante el mes de diciembre de 2023, encabezadas por los grupos "ISIS" y "Al-Qaeda" y sus afiliados. Durante este mes, el número de operaciones terroristas llevadas a cabo por estas organizaciones fue de 19, que incluyeron explosiones, asesinatos y ataques suicidas. Estas operaciones resultaron en la muerte de 165 personas, 51 heridos y 7 secuestrados, además de cientos de desplazados.
La intensidad de las operaciones terroristas en África varía según las condiciones de seguridad. Según las estadísticas, el índice de operaciones terroristas disminuyó en diciembre de 2023 en comparación con el mes anterior en un 17.4%. En noviembre de 2023, el número de operaciones terroristas fue de 23, que resultaron en la muerte de 128 personas, 33 heridos y 15 secuestros.
El número de víctimas de los ataques terroristas en diciembre fue significativo, a pesar de que el número de ataques fue menor que en noviembre. Esto también indica que las operaciones terroristas se centran en objetivos específicos con el fin de causar el mayor número posible de muertes y heridas. Por lo tanto, es importante tener en cuenta que no es la cantidad de operaciones lo que importa, sino el número de víctimas y las pérdidas resultantes de esas operaciones.
Región del este de África
Según las estadísticas que han sido elaboradas por la unidad, la región de África Oriental ocupó el primer lugar en términos de número de ataques terroristas y el segundo lugar en número de víctimas durante el mes de diciembre. La región registró 10 ataques terroristas, lo que representa el 52.7% del total de ataques terroristas, que resultaron en la muerte de 24 personas y 19 heridos. Somalia fue el país más afectado por esos ataques, con la ejecución de 7 operaciones terroristas diversas, incluyendo asesinatos y suicidios, que resultaron en 11 muertes y 19 heridos. Uganda también experimentó dos incidentes terroristas que causaron la muerte de 13 personas sin heridos.
El liderazgo de la región de África Oriental en el escenario de los ataques refleja la notable actividad de los elementos del grupo terrorista Ash-Shabaab, quienes buscan enviar un mensaje propagandístico a sus oponentes, demostrando la fortaleza y brutalidad del grupo, así como su permanencia en tierra firme a pesar de los contratiempos. Además, esta situación alimenta el espíritu de entusiasmo y resistencia en sus combatientes, evitando la rendición, y asegura el continuo apoyo y respaldo de sus seguidores, especialmente aquellos que han sido influenciados y manipulados por sus ideas.
En cuanto a la región del Sahel y el Sáhara, ocupó el segundo lugar en términos de número de ataques, pero ocupó el primer lugar en número de víctimas mortales. La región presenció 7 ataques terroristas, que representaron el 36.8% del total de ataques terroristas, resultando en la muerte de 131 personas, 32 heridos y el secuestro de otras 7. Burkina Faso fue escenario de 4 ataques terroristas que causaron la muerte de 51 personas y dejaron 32 heridos. Mientras tanto, en Mali se produjeron 3 ataques terroristas que resultaron en la muerte de 80 personas y el secuestro de otras 7. El vacío de seguridad resultante de los retiros frecuentes de enfoques de seguridad regionales e internacionales ha sido explotado por las organizaciones terroristas activas en la región, lo que ha intensificado su actividad terrorista y ha llevado a un gran número de víctimas. Por lo tanto, los países afectados en la región deben adoptar estrategias efectivas para evitar la infiltración de estas organizaciones en su territorio y prevenir cualquier posible ataque en los próximos días.
En cuanto a la región de África Central, se ubicó en el tercer lugar, registrando dos incidentes terroristas, que representaron el 10.5% del total de ataques terroristas, ambos en la República Democrática del Congo y atribuidos a los combatientes de las Fuerzas Democráticas Aliadas afiliadas a la organización terrorista ISIS, lo que resultó en la muerte de 10 personas.
Se observa que la violencia ha disminuido en la República Democrática del Congo durante la realización de las elecciones generales en el país el pasado 20 de diciembre, gracias al apoyo logístico brindado para asegurar las elecciones y prevenir cualquier intento de obstaculizarlas. Además, de manera inusual, se ha mantenido una relativa calma en Camerún, sin sufrir ningún ataque terrorista durante este mes.
En cuanto a la región de África Occidental, y según el Índice de Terrorismo en África, la región de África Occidental fue la más tranquila y estable durante este mes, ya que no se registraron operaciones terroristas. Se cree que las operaciones militares contra los grupos terroristas ISIS en África Occidental (ISWAP) y Boko Haram son factores que contribuyeron a la disminución de la actividad terrorista en la región.
En cuanto a los esfuerzos de lucha contra el terrorismo en África durante diciembre de 2023, las pérdidas de los grupos terroristas fueron de 341 muertos, 4 detenidos y la rendición voluntaria de otros 4 individuos.
En la región de África Oriental, el gobierno somalí mató a 284 combatientes del grupo terrorista Ash-Shabaab y arrestó a 3, mientras que 2 se rendieron. Además, el ejército keniano logró arrestar a un miembro de Ash-Shabaab.
En la región del Sahel, los esfuerzos del ejército maliense llevaron a la eliminación de 16 elementos terroristas, mientras que las fuerzas nigerianas lograron neutralizar a otros 20.
En la región de África Occidental, los esfuerzos del ejército nigeriano en la lucha contra Boko Haram y el Estado Islámico en África Occidental (ISWA) resultaron en la muerte de 21 terroristas.
El Observatorio de Al-Azhar para Combatir el Extremismo sostiene que el terrorismo no terminará con eslóganes brillantes y correspondencia diplomática, sino con el compromiso sincero de las partes involucradas a nivel local, regional e internacional para imponer la seguridad y la verdadera estabilidad en todos los rincones del país, aumentar las tasas de crecimiento y lograr la seguridad social de los ciudadanos en términos psicológicos, físicos y de salud, además de fortalecer el control sobre diversas áreas para que no sean refugios para organizaciones extremistas. El observatorio desea para África y el mundo en general un nuevo año libre de violencia, extremismo y terrorismo, sin importar su nombre o ideología.