Más de cien mujeres fueron secuestradas en el noreste de Nigeria en un ataque atribuido a milicianos, según informaron fuentes oficiales a la agencia de noticias France Presse, después de estimaciones anteriores que hablaban de al menos 47 mujeres secuestradas.
Líderes de milicias anti-milicianos acusan a la organización Estado Islámico en África Occidental de estar detrás de este ataque en el estado de Borno, que ha sido escenario de una insurgencia yihadista que ha cobrado la vida de más de 40,000 personas y ha desplazado a dos millones de habitantes desde 2009.
El ataque tuvo lugar la semana pasada en la región de Ngala, pero muchos detalles aún no están claros, incluido el número exacto de desaparecidos.
Ali Bukar, un funcionario de la unidad de información del gobierno local de Ngala, dijo a France Presse que los residentes de Ngala confirmaron la desaparición de 113 personas.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) informó que el ataque tuvo lugar el pasado 29 de febrero y que se secuestraron a doscientas personas que vivían en campamentos de desplazados mientras recolectaban leña.
La misma fuente indicó a France Presse que esta cifra se basa en estimaciones de líderes locales y señaló que las operaciones de búsqueda aún están en curso en cuatro campamentos de desplazados.
El líder de una milicia anti-milicianos, Shehu Mada, señaló el martes que las mujeres de los campamentos de desplazados fueron atacadas "por rebeldes de la organización Estado Islámico en África Occidental" el viernes.
Agregó que "algunas mujeres lograron escapar", y señaló que no se ha encontrado a "47 mujeres".
Los secuestros en Nigeria, que se llevan a cabo principalmente para obtener rescates, son un problema grave que afecta a todo el país.
A principios de febrero, milicianos secuestraron al menos a 35 mujeres mientras regresaban de una boda en el estado de Katsina, en el noroeste del país.