Las instrucciones y orientaciones de Allah y del profeta nos guían al camino recto en la vida con el fin de la prevención de la propagación de Fitna (tentaciones) y, al mismo tiempo, para impedir la corrupción en nuestras comunidades. En este sentido, el Islam prohibió a los musulmanes vender armas -en el tiempo de las tentaciones- ya que podría conducir al surgimiento de enemistades y; por consiguiente, la muerte de inocentes; niños, ancianos y mujeres.
Al respecto, Allah -Altísimo sea- dice: “Y si dos bandos de creyentes luchan entre sí, reconciliadlos, pero si uno de ellos abusa del otro, combatid al que haya abusado hasta que vuelva a la orden de Allah; y si lo hace, arreglad las cosas entre ellos con justicia y siendo equitativos. Es cierto que Allah ama a los equitativos”. (Sura de las Habitaciones: 09). Además, al-Bujari y Muslim relataron en sus libros Sahih que el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- prohibió la venta de armas en el tiempo de fitna.