En un clima de acogida y atención tanto formales como públicas ha otorgado la Universidad indonesia islámica de Maulana Malik Ibrahim el grado de doctorado honoris al Gran Imam de Al-Azhar y presidente del Consejo de Sabios Musulmanes, Prof. Ahmed Attayeb, en una inmensa celebración en el campus de la universidad en la provincia de Java del Este con la presencia de muchos decanos, profesores y estudiantes indonesios; mientras que cientos de personas se congregaron en las calles expresando su contento por la visita del Gran Imam.
En el discurso que pronunció en el evento, el Gran Imam confirmó que el conocimiento es el escudo de protección de la ummah (comunidad islámica), indicando que el mensaje de Al-Azhar es aferrarse a la metodología sunní de las diferentes escuelas y subrayando que la educación es un mensaje noble, ya que es la misiva de todos los mensajeros de Dios.
Mencionó Attayeb que Al-Azhar asume la responsabilidad de la parte científica y predicativa del Islam, puesto que el discurso del Al-Azhar se caracteriza por la moderación; aclarando que Al-Azhar adopta la metodología de los seguidores de la sunna, puesto que siempre acude al análisis detenido de los textos clásicos, y señalando que la aceptación que recibe este discurso en todo el mundo se debe a la combinación moderada que hace Al-Azhar del pensamiento científico y el espíritu sufí.
Sobre su crecimiento, dijo el Imam que creció en un ambiente árabe y espiritual de una casa de religión y conocimiento que contaba con un padre noble del que ha heredado mucho.
Finalizando su enunciación, expresó el Imam su alegría por este homenaje que se trata de una fortificación a la hermandad entre Al-Azhar de Egipto y la Universidad de Maulana Malik Ibrahim. También afirmó la apreciación de Al-Azhar a la Universidad indonesia, señalando el apoyo que su institución la ofrecerá mediante profesores y ulemas.
A continuación exponemos el discurso textual del Gran Imam
En el nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso.
Prof. Dr. Mudyina Raha Rdyio, jefe de la Universidad islámica pública de Maulana Malik Ibrahim; hermanos y colegas profesores de la Universidad; hijos e hijas estudiantes,
¡La paz sea con ustedes!
Tanto me alegra y honora unirme con ustedes, ulemas e investigadores jóvenes, en el seno de su universidad, percibir el clima científico y el anhelo al saber en sus almas que echo de menos lo que ustedes hacen y que quisiera retornar a los días en los que movía en mi universidad saboreando un texto antiguo o una idea nueva o orientando a un investigador joven.
Este sentimiento lo conoce bien quien haya optado por el camino del saber y la enseñanza, que es la pista de los profetas. Nos basta el honor que nos otorga el dicho profético en el que dice: “Seguramente fue enviado como docente”. Asimismo aprecia este sentimiento quien haya saboreado el placer de descubrir la verdad después de mucha investigación, esfuerzo y compromiso. El Imam Algacel –descanse en paz- a menudo repetía: “le preguntaron a un sabio qué era la felicidad, y éste dijo que era “una prueba que se confirma; y una falsedad que se refuta”.
Conocimiento es el tesoro que más se debe buscar; es el primer deber de todos los sabios y es la herencia de los profetas: dice el Profeta Muhammad: “Los Profetas no dejan atrás un dinar ni un dírham en herencia, sino el conocimiento”. Es el camino hacia el paraíso; “Quien recorre una vía buscando en ella conocimiento, Alláh le facilitará un camino hacía el Paraíso”. Es el escudo que protege nuestra ummah; “Dios no retira el conocimiento retirándolo de una vez de los corazones de los hombres sino que lo hace con la muerte de los sabios. Así será hasta que no quede sabio alguno. La gente tomará a ignorantes como líderes, y éstos, al ser consultados, emitirán su juicio sin tener conocimiento. Se desviarán y desviarán a la gente».
Les felicito por esta vida agradable y felicito a quien Dios haya otorgado el honor del conocimiento y lo preservara; “Allah elevará en un grado a los que de vosotros crean y a los que han recibido el conocimiento”. (Corán 58:11)
Y les afirmo, hermanos, que desde hace más de un milenio en Egipto, el país que se sitúa en dos continentes -Asia y África, la cuna de la civilización y de la revelación divina- se construyó un faro que iluminó todos los rincones del mundo, y sobre todo a los jóvenes de ambos continentes, los de la ummah islámica.
Este es Al Azhar Honorable que gracias a él me presento ahora ante ustedes. Considero que el homenaje, agradecido y apreciado de nuestra parte, que prepararon nuestros hermanos en Indonesia y en Java, la fortaleza de la ciencia y los científicos, es homenaje para la institución de Al Azhar, tanto para su mezquita como para su Universidad, además es homenaje para todos los musulmanes representados en la figura de Ahmed Attayeb, servidor de Al-Azhar Honorable, la ciencia y los científicos, y se siente a si mismo tan pobre ante Allah, El Todopoderoso, Alabado sea.
Señores y señoras, como saben ustedes, Al-Azhar no es una institución ilustre o una universidad universal solamente, quizás la más antigua en la historia de la humanidad que aún sigue dando sus frutos sin parar a lo largo de estos siglos hasta la actualidad, sino es un método intelectual distinguido.
Al-Azhar asume la responsabilidad científica y predicativa del mensaje del Islam, el último mensaje divino dirigido a la humanidad entera, el mensaje de paz universal, igualdad, justicia, dignidad humana y liberación de las restricciones que les atan a los seres humanos. El Islam cree en todos los mensajeros que envió Allah a la humanidad y en todos los libros revelados, (El Mensajero cree en lo que se le ha hecho descender procedente de su Señor y los creyentes (con él).
Todos creen en Allah, en Sus ángeles, en Sus libros y en Sus mensajeros: "No aceptamos a unos mensajeros y negamos a otros".
Y dicen: Oímos y obedecemos, (danos) Tu perdón Señor nuestro, y hacia Ti es el retorno) (Corán 2:285).
Al-Azhar adopta la metodología de los seguidores de la sunna para comprender y aprender dicho mensaje, y se apoya también en el pensamiento del imam Abul Hasan Al-Ashary con sus escritos que echaron raíces para la reflexión mental en la sunna y en el Corán con moderación y profundidad. Esta metodología se refleja también en los libros originales de los imames seguidores de los alfaquíes de la umma sin fanatismo ni exclusión. Las opiniones de Abu Hanifa, Malek, Al shafii y Ahmed se estudian en la mezquita y Universidad de Al Azhar, en un ambiente de tolerancia intelectual con una visión objetiva al mismo tiempo y una investigación con una buena voluntad y buen objetivo de las pruebas más evidentes y las más convenientes para satisfacer las necesidades de la umma en sus circunstancias variables y sus desgracias renovables.
Así, Al-Azhar estableció un plan de estudio que se basa, en primer lugar, en construir una reinado sólido entre sus hijos en la lengua árabe con sus secretos ingeniosos, y luego estudiar el Noble Corán, la Sunna del Profeta y todos las ciencias que les sirven, extraer las sentencias de creencia y las científicas también, es decir, las ciencias de los principios de la religión y los de la jurisprudencia islámica, las ciencias del Corán, los dichos del Profeta, las ciencias de la jurisprudencia comparada, y estar al corriente de todo lo necesario que les ayude a comprender la actualidad; el pasado de la cultura islámica, y el desarrollo de dicha cultura en sus diferentes etapas, y la cuna de la cultura humana en general; la filosofía occidental y oriental, las literaturas clásicas y las contemporáneas con el fin de abastecer de ello lo que les ayude a comprender el pasado y el presente, y la capacidad que les permite evaluar el futuro y emitir fetuas durante las desgracias y los sucesos que se renuevan de vez en cuando a base de una metodología científica y fuentes aprobadas.
Si me preguntan sobre la característica más destacada en la metodología de Al-Azhar en el plan científico, diría que es la metodología del análisis del texto con profundidad del patrimonio árabe islámico de los catorce siglos para que se formara, aparte del talento lingüístico, el legislativo que ayuda a los graduados inteligentes para cumplir con las necesidades de la umma, algo que les convierte, luego, en una referencia acreditada en todo el mundo islámico.
Se me ha predestinado, gracias a Allah, entrar en esta institución tan antigua tras haber recibido una formación árabe espiritual en un hogar reinado por la ciencia y la religión, a manos de padres cariñosos de los cuales heredé muchas cosas buenas, y suplico a Allah que le recompense por ello. Luego me he disfrutado con la custodia de los eruditos de Al-Azhar que reunieron la ciencia jurídica según los grandes imames y la sabiduría islámica igual que el filósofo árabe Yacub Al-Kanady que lo había creado y el camino espiritual a través de los imames devotos, como Al-Junaid Al-Baghdadi, Al-Hariz Al-Muhasaby, Abul Kasem Al-Qushiry y Algacel, que se trata de una mezcla dominada por los ulemas de Al-Azhar a partir del imam Hasan Al-Attar, Ulaish, Muhamed Abdou, Al Maraghy, Mustafa Abdel Razek, Soliman Donia, entre otros, Que Allah les perdone a todos.
Estas son las fuentes del discurso de Al-Azhar, caracterizado por la moderación en la creencia entre los seguidores de los píos antepasados cautelosos de la similitud y de los errores de la interpretación, y los sucesores que prefieren la reflexión y apoyan la interpretación según las normas de la lengua árabe y el significado de la jurisprudencia, como en el caso de lo que fue relatado sobre Imam de Dar al-higra (casa de inmigración): "el asentamiento es conocido, el cómo es desconocido, creer en él es necesario, y preguntar sobre él es una innovación falsa). Y de igual modo es la moderación entre el fanatismo y el seguimiento a ciegas a una secta en concreto.
La aceptación que recibe el método de Al-Azhar en todo el mundo se debe a la combinación moderada que hace del pensamiento científico y el espíritu sufí, una mezcla que se aferra a la moderación en la doctrina y que refleja el espíritu original del Islam patente en todos los musulmanes, a no considerar unas voces marginales de acá y de allá.
Hermanos, estoy muy contento de estar aquí con mis hermanos javaneses. He servido al conocimiento y a sus aspiradores en muchas universidades del mundo islámico, y ahora represento ante ustedes la institución islámica majestuosa de Al-Azhar, cuyo liderazgo se me impuso en un tiempo de turbulencia, pero cuento primero con la gracia de Dios y luego con su apoyo, devoción, y compromiso hacia la religión, la herencia científica y la cultura humana.
Les agradezco a todos el honor que me otorga este doctorado, que creo que es un homenaje a la hermandad entre el Egipto de Al-Azhar y la Universidad de Maulana Malik Ibrahim.
Gracias a todos, y la paz sea con ustedes.